La mitología celta es un campo extremadamente fértil para la narrativa fantástica, y sus mitos y leyendas forman una de las bases más importantes para mucho de lo que se ha escrito en este género. Las ideas de elfos inmortales viviendo en bosques encantados o en grutas maravillosas, de mundos sobrenaturales donde el tiempo transcurre a un ritmo propio, de seres feéricos tanto benévolos como malvados que comparten el mundo con los mortales, de sabios magos que actúan como consejeros de reyes y guerreros, todos estos conceptos y muchos otros se los debemos en buena medida a los mitos celtas.
Es inevitable que este caldero de la abundancia haya alimentado la imaginación de muchos autores de lo fantástico, que han acudido directamente a él en busca de inspiración directa.
Y si no, que se lo digan a la gente de Just2D a la hora de llevar a cabo Drova – Forsaken Kin, un Action-RPG en pixel art inspirado en los clásicos oscuros del género. Un juego que nos cuenta la historia de una sociedad ha descubierto el poder de un imperio abocado al olvido: la posibilidad de capturar los espíritus que gobiernan la naturaleza y dominarlos. Inevitablemente, tal poder ha provocado que el mundo se haya dividido en dos facciones. Y aquí viene el quid de la cuestión, puesto que tendremos que unirnos a una de las dos facciones, cada una con sus propios valores y objetivos.
Por supuesto, nuestra elección será relevante para el resto de la aventura e impactará en los hechos que puedan acaecer.
La mitología celta es la protagonista
Sea como fuere, sobrevivir en este mundo será el primer asunto del que preocuparse dado que podemos ir a cualquier parte desde el primer momento y se nos incitará a viajar de un lado a otro buscando cosas útiles que nos permitan avanzar y, también, encargos aptos para los niveles iniciales. Esto convierte las primeras horas en una sucesión de caminatas, combates y huidas a lo largo y ancho del mapeado, pudiendo sentir que tardamos demasiado en ver algún tipo de mejora en nuestro personaje, especialmente en lo referente al equipo disponible.
Esto debe servir de llamada de atención para los menos acostumbrados a los juegos de rol y supervivencia, pero los veteranos también tendrán su reto asegurado si se lanzan a la aventura en el nivel máximo de dificultad.
A lo largo de nuestra aventura conoceremos muchos personajes que nos darán opción de abrir líneas argumentativas paralelas que, en algunos casos, no desmerecen en absoluto la historia principal, ya sea por una cuestión de guión o de puro entretenimiento e interés.
Inmersión y libertad total
Libertad. Poder hacer lo que te venga en gana… ateniéndose a las consecuencias.
Qué bien suena, qué bien luce en la descripción de las grandes aventuras de rol, pero qué pocos videojuegos son capaces de hacerte sentir, realmente, que tus actos influyen de forma clara en el devenir de la acción, en la vida de todos esos personajes que pululan alegremente por los mundos virtuales que tanto nos gusta explorar. Piranha Bytes, autores de Gothic o Risen, son uno de los pocos estudios que entienden bien la trascendencia de estas palabras y lo saben reflejar en todos sus trabajos. Por suerte, no son los únicos de un tiempo a esta parte, puesto que Just2D ha entendido este concepto a las mil maravillas con Drova – Forsaken Kin.
Dicho de otra manera. El planteamiento del juego que protagoniza estas líneas es tremendamente sencillo: es un RPG extremadamente libre que permite al jugador disfrutar de la aventura como se le antoje. Esto se traduce en que, tras un breve tutorial en el que nos presentan las mecánicas más básicas, nos sueltan en medio del mundo con un único objetivo: sellar el poder de los espíritus que la gobiernan, dándonos unas pistas generales pero dejando claro que vamos a poder hacer lo que nos venga en gana a la hora de afrontar la trama.
Precisamente esta libertad se traduce en que las decisiones que vayamos tomando van a ser las que vayan dando forma a nuestra aventura.
Inspirado por clásicos del género rolero
Tras las primeras horas, toca elegir cómo vamos a afrontar los acontecimientos que nos esperan, y es que las distintas facciones ofrecen distintas ventajas y, por obligación de la trama va a tocar unirse a una. Algunas de estas facciones están enfrentadas entre sí, además de ofrecer cada una distintas ventajas, que van desde magia exclusiva a armas capaces de causar un daño demoledor.
Con todo esto, podría decirse que Drova – Forsaken Kin es un viaje al pasado, y no lo digo en mal sentido. Los amantes de los RPG más hardcore van a disfrutar del juego, y es que la sensación de libertad es absoluta desde el principio.
No es para todo el mundo, eso queda bastante claro, pero los fans de Gothic tienen ante sí un título en el que sumergirse y que ofrece un millón de posibilidades.
Este análisis ha sido realizado gracias a una clave digital de PC facilitada por PR Hound.