Ginger

Los videojuegos siempre han representado el desarrollo tecnológico de nuestra época e, incluso, la posibilidad de nuevas vías de formación personal más interactivas. Aunque muchos no fueron diseñados con el objetivo de brindar un aprendizaje específico, sí que han servido para desmontar el mito de que “no existen los videojuegos educativos”. 

Y si no, que se lo digan a propuestas como Ginger – The Tooth Fairyes, un juego de plataformas en 2D de desplazamiento lateral diseñado sobre todo para los más pequeños y recién llegados al mundo de los videojuegos. Un juego en el que Ginger, parte protagónica de esta aventura, tiene que explora varios mundos llenos de obstáculos para superar con el fin de encontrar sus dientes mágicos. 

Es lo más parecido a un viaje educativo que enseña lecciones importantes sobre los dientes tanto a niños como a adultos, porque los dientes sanos son importantes y el tema debería ser divertido, después de todo. Es lo mismo que nos enseña el Ratoncito Pérez (o el hada de los dientes, un personaje de fantasía de la cultura occidental de habla inglesa), una figura que fomenta la responsabilidad al premiar a los niños que cuidan de sus dientes y mantienen una buena higiene bucal.

El cuento del Ratoncito Pérez

Los años no pasan en balde para nada ni para nadie, ni siquiera para algunos de los mejores videojuegos de la historia, aunque no es menos cierto que algunos aguantan mejor el paso del tiempo que otros. Por ejemplo, en el mundo de las tres dimensiones, no todos los motores han sido capaces de lidiar con el paso del tiempo, aun cuando en ocasiones la propia nostalgia nos hace recordar siempre con buenos ojos aquellas grandes obras que nos divirtieron y cautivaron en el pasado.

Si bien, con Super Mario 64 la gente de Nintendo quiso romper con todo aquello reinterpretando el uso de escenarios 3D y dándole un enfoque más natural a cómo debía emplearse los elementos tridimensionales en un videojuego, no todos los contendientes hicieron lo mismo (Crash Bandicoot). En el caso que protagoniza estas líneas, se apuesta enteramente por las fases horizontales sin perder de vista elementos clásicos como toda clase de secretos. Todo ello sin dejar de lado en ningún momento la experiencia de juego y la diversión, algo que siempre ha estado muy arraigada a la filosofía de estas compañías sobre cómo deben diseñarse los videojuegos.

Dicho de otra manera, jugablemente, Ginger – The Tooth Fairyes lo más parecido a un viaje en el tiempo en el que pasamos mucho tiempo saltando y golpeando enemigos. Un viaje con una estética píxel en el que tenemos que explorar cada rincón de los numerosos niveles que componen cada aventura para encontrar todos los secretos que hay en su haber. Eso y enfrentarnos a los distintos desafíos que se interpondrán en nuestro camino mientras intentamos tener los dientes lo más sanos posibles. 

Bajo esta premisa, no es tan fácil como parece seguir cogiendo algo que era divertido hace más de 20 años y adaptarlo con una apariencia renovada a los tiempos que corren, pero al final, el juego de marras resulta divertido, bonito y accesible. Una pastilla para la nostalgia mientras llevamos a cabo un viaje para salvar un mundo de ensueño.

Más plataformas 2D de autor

A veces, es necesario y es importante detenerse, echar una mirada hacia atrás y contemplar el camino recorrido para ver, de un tiempo a esta parte, como han evolucionado los juegos de plataformas. Tanto es así que para hablar de Ginger – The Tooth Fairyes, ha sido necesario poner nuestras miras en algunas de las franquicias anteriormente nombradas. Después de todo, la obra desarrollada por la gente de Brainium Games basa su jugabilidad en correr, saltar, golpear y esquivar peligros, normalmente corriendo de un lado a otro de la pantalla o en niveles de desarrollo con una mayor profundidad, aunque hay excepciones.

Con todo esto, la obra que nos ocupa se convierte en todo un ejemplo de cómo hacer un plataformas, y un inmejorable testimonio de por qué nos sigue pareciendo uno de los géneros estrella en el mundo de los videojuegos.

Este análisis ha sido realizado gracias a una clave digital de Nintendo Switch facilitada por PressEngine.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí